miércoles, 24 de noviembre de 2010

Hace varios años ya que no tengo pijama.
Y digo un pijama de verdad,
de esos que se compran,
que hacen juego
y son suaves por dentro.
Cuando era chica tuve uno con elefantes que tocaban en una banda,
y algunos años despues
use durante un tiempo uno de mi tia,
si, la que se murio.
Hoy son remeras, cualquiera,
cortadas y dibujadas.
Algunas tienen historias para contar,
salieron de paseo alguna que otra vez.
Y otras se acuerdan de vos
felices y melancolicas.


Por ahi me cuesta dormir
porque no encontre el pijama
o la remera indicada.
Por ahi te extraño tambien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario